DIA 10
Por la tarde teníamos nuestra experiencia en un tren indio a ver qué tal se nos daba.
Bueno pues no ha ido tan mal, encontrar los asientos ha sido un poco lioso, pero bueno dimos con
ellos, teníamos el tres y el cinco, en 2 AC, decir que los vagones se conocen por fuera porque van
marcados en letra grande, por dentro los asientos van numerados desde el 1 hasta él no se cual,
o sea el primer compartimento que es de cuatro son 1 arriba 2 abajo 3 arriba 4 abajo y dos en el
pasillo 5 pasillo arriba 6 pasillo abajo luego el siguiente compartimento es 7 8 9 y asi
sucesivamente.
Nosotros teníamos una litera abajo y una litera pasillo también abajo
Nos tocó con dos chicos franceses muy simpáticos, y un par de indios bastantes agradables, el
viaje hasta Jaipur perfecto, hablamos en inglés, en francés (cuando digo hablar es decir cuatro
palabras) y si hubiera hecho falta hablamos hasta en indio.
Dicho esto, he dicho que hasta Jaipur perfecto, allí se bajan los franceses y un Indio y de pronto
entra la marabunta, un lio, empujones, voces y nosotros quietos paraos con los ojos abiertos,
llega un indio y se acopla en la litera de arriba, solo queda la litera de abajo y de pronto llegan
por los menos seis o siete más, con bultos por todos lados y empieza a gritar, por lo que se ve no
tenía sitio donde dejar los bultos, amosssssssss, amossss , amossssssssssss, y que quería que
sacáramos nuestras maletitas a este se le ha ido la olla, pues ya puede gritar que mis maletas no
se mueven, al final discusión con el primer indio que nos acompañaba en el viaje y llamaron al
revisor y este le coloco el equipaje en otros compartimentos pero vamos que no exagero cuando
digo que llevaba siete u ocho bultos.
Bueno pues ya todo el viaje fue una riña entre los dos indios, que no fue a mayores pero que era
muy desagradable.
Ayer fue una pequeña paliza, con el viaje y las visitas apenas descansamos y hoy tenemos el viaje
en tren a Jaisalmer, quedamos con el conductor a las nueve, creo que fue un poco tarde porque
perdimos mucho tiempo en el fuerte rojo debido al tráfico y que estaba todo cortado por la visita
del primer ministro, me ha dado la impresión que le adoran parece que está haciendo cosas muy
buenas. Pues vimos el fuerte rojo, el Raj gat, el templo de Loto y alguna cosilla mas
en tren a Jaisalmer, quedamos con el conductor a las nueve, creo que fue un poco tarde porque
perdimos mucho tiempo en el fuerte rojo debido al tráfico y que estaba todo cortado por la visita
del primer ministro, me ha dado la impresión que le adoran parece que está haciendo cosas muy
buenas. Pues vimos el fuerte rojo, el Raj gat, el templo de Loto y alguna cosilla mas
Por la tarde teníamos nuestra experiencia en un tren indio a ver qué tal se nos daba.
Bueno pues no ha ido tan mal, encontrar los asientos ha sido un poco lioso, pero bueno dimos con
ellos, teníamos el tres y el cinco, en 2 AC, decir que los vagones se conocen por fuera porque van
marcados en letra grande, por dentro los asientos van numerados desde el 1 hasta él no se cual,
o sea el primer compartimento que es de cuatro son 1 arriba 2 abajo 3 arriba 4 abajo y dos en el
pasillo 5 pasillo arriba 6 pasillo abajo luego el siguiente compartimento es 7 8 9 y asi
sucesivamente.
Nosotros teníamos una litera abajo y una litera pasillo también abajo
Nos tocó con dos chicos franceses muy simpáticos, y un par de indios bastantes agradables, el
viaje hasta Jaipur perfecto, hablamos en inglés, en francés (cuando digo hablar es decir cuatro
palabras) y si hubiera hecho falta hablamos hasta en indio.
Dicho esto, he dicho que hasta Jaipur perfecto, allí se bajan los franceses y un Indio y de pronto
entra la marabunta, un lio, empujones, voces y nosotros quietos paraos con los ojos abiertos,
llega un indio y se acopla en la litera de arriba, solo queda la litera de abajo y de pronto llegan
por los menos seis o siete más, con bultos por todos lados y empieza a gritar, por lo que se ve no
tenía sitio donde dejar los bultos, amosssssssss, amossss , amossssssssssss, y que quería que
sacáramos nuestras maletitas a este se le ha ido la olla, pues ya puede gritar que mis maletas no
se mueven, al final discusión con el primer indio que nos acompañaba en el viaje y llamaron al
revisor y este le coloco el equipaje en otros compartimentos pero vamos que no exagero cuando
digo que llevaba siete u ocho bultos.
Bueno pues ya todo el viaje fue una riña entre los dos indios, que no fue a mayores pero que era
muy desagradable.